Las organizaciones activistas Greenpeace y Amigos de la Tierra han publicado recientemente el informe «al grano» sobre el cultivo del maíz OMG en España, cuya presentación se ha acompañado de unas de sus habituales representaciones teatrales ocupando un campo de maíz en Villanueva del Gállego (Zaragoza).

Dentro del informe, se alude a un estudio previo de Graham Brookes sobre la misma cuestión contradiciendo el mismo, en el sentido de que las organizaciones afirman que no existen beneficios agronómicos apreciables en el uso del maíz Bt.

El profesor Boookes ha emitido un comentario a este respecto, señalando que las aseveraciones de Greenpeace carecen de base, ya que se basan exclusivamente en un solo ensayo a pequeña escala realizado en Navarra que además apenas sufrió incidencias de la plaga del taladro.

Los datos del estudio de Brookes, que ya mencionan la existencia de una gran variabilidad en las ventajas del maíz Bt según se tengan o no problemas de taladro, provienen sin embargo de cultivos comerciales en diferentes zonas, en cuatro campañas y diferentes condiciones agronómicas, cubriendo 500 explotaciones y 15.000 Ha de maíz, de las cuales 4.000 eran de maíz Bt.

En regiones donde el taladro es común los beneficios medios constatados por Brookes fueron entre el 10% y el 15% en cosecha, con una significativa reducción de los tratamientos insecticidas.