Las nuevas variedades de arroz “Nerica” (New Rice for Africa) están teniendo un gran éxito en sus primeros años de cultivo en Africa Central y Occidental, siendo las más demandadas por los agricultores en varios países, según informa Naciones Unidas.

Las primeras variedades “Nerica” fueron introducidas en 1997, suponiendo una auténtica revolución para muchas familias de la agricultura de subsistencia, que han pasado de tener los justo para comer a poder vender excedentes en el mercado.

Los arroces “Nerica” son una obtención de la Asociación para el Desarrollo del Arroz en África Occidental (WARDA), una organización financiada por el Programa de Desarrollo de naciones Unidas (UNDP). Estas variedades son un 50% más productivas que las tradicionales en condiciones de secano y sin fertilizantes y han sido obtenidas por cruzamientos entre variedades tradicionales africanas rústicas y variedades asiáticas de alta productividad. Además de los mayores rendimientos son más precoces, tienen más proteína y son más resistentes a enfermedades y a la sequía que las variedades tradicionales.
El potencial del arroz “Nerica” ha sido reconocido por el Nuevo Acuerdo para el Desarrollo de Africa (NEPAD), el plan adoptado por los líderes del continente en 2001, reconociéndolo como una de las mejores prácticas para mejora la producción agraria y la seguridad alimentaria en el continente. Actualmente hay 10 variedades “Nerica” provenientes de los cruzamientos originales de arroces africanos y asiáticos. Estas variedades son muy rústicas, aunque ya se están probando otras nuevas adaptadas a otras condiciones agronómicas.