Según un estudio sueco-australiano las puestas en regadío y las forestaciones y deforestaciones tienen una gran influencia en los ciclos hidrológicos, en tanto alteran la cantidad de vapor de agua que se libera a la atmósfera. La deforestación de los últimos años ha hecho disminuir la evaporación en un 4% , unos 3.000 metros cúbicos al año, mientras que el regadío la ha aumentado en unos 2.600 metros cúbicos al año.
A pasar de que aparentemente estas cantidades se compensan aproximadamente, las distribuciones espaciales de deforestación y puestas en regadío son distintas, modificándose los patrones del ciclo hidrológico global. Así por ejemplo, una gran deforestación se viene produciendo en África Subsahariana, mientras que la mayor intensificación de la agricultura se da principalmente en el Asia Monzónica, modificandose los flujos de vapor de agua.
El estudio sugiere que la necesidad de incrementar la producción de alimentos en una región del Planeta puede afectar a la capacidad productiva de otra, y subraya la necesidad de un mayor conocimiento de los patrones climáticos globales para poder determinar la influencia de la utilización de la tierra en el clima.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.