Según un estudio de la Universidad de Cornell (EEUU) las ventajas del uso en China del algodón transgénico tipo Bt, resistente a plagas se han visto erosionadas por el tiempo, debido al surgimiento de otras plagas que no eran en principio problemáticas.

El algodón Bt es resistente a los insectos que se comen la planta, especialmente a las larvas que devoran la cápsula, que son la principal plaga del cultivo en todo el mundo. Sin embargo esta característica no afecta a algunos otros insectos que normalmente son plagas secundarias, como es el caso de los míridos (chinches), que no se comen, sino que chupan la planta. En el cultivo convencional, estos insectos se controlan por los mismos insecticidas de amplio espectro que se aplican para combatir a las larvas de la cápsula.

El problema no es que se haya desarrollado resistencia en los gusanos sino el surgimiento de las plagas secundarias como principales, un hecho que no se conoce en otros países donde el algodón Bt se cultiva de forma masiva como EEUU, India, Sudáfrica, Australia o México.

La implantación de cultivo de algodón Bt en China hace siete años tuvo un gran éxito con reducciones en el uso de pesticidas de más de un 70%. China es el mayor productor mundial de algodón y más del 50% de su algodón es de tipo Bt.

Los autores concluyen que es necesario investigar una solución a este problema como el uso de predadores o el desarrollo de algodones Bt de mayor espectro insecticida.