Adicionar ciertas cantidades de grasa en la dieta de los cerdos tiene ventajas como que se aumenta el contenido calórico de la alimentación (la grasa proporciona 2,5 veces más energía en relación con otros ingredientes adicionados en la misma cantidad), aumenta la ganancia de peso, mejora la eficacia y calidad del alimento, mejora la eficacia reproductiva y reduce el incremento de calor.

Según el tipo de grasa que se utilice, se produce un impacto diferente en la calidad de la grasa de la canal, de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Purdue. La evaluación física se ha realizado a través de la firmeza, cohesividad y color de la grasa. La evaluación sensorial, a través de la palatabilidad.

Se ha comprobado que variando los puntos de fusión de los diferentes ácidos grasos se varía la firmeza de la grasa. Por este motivo, la composición de ácidos grasos tiene un importante efecto en la calidad de la grasa. Los ácidos grasos insaturados son más proclives a la oxidación lipídica, lo que afecta a la duración de la vida del producto en los lineales.

También se ha observado que la adición de ácidos linoleicos conjugados (CLA) en la dieta de los cerdos influye en la calidad de la grasa. Cuando se incluye un 0,75% de CLA en la dieta de los cerdos de cebo, se mejora la eficacia del pienso, desciende la grasa en la espalda y mejora la firmeza y entreverado del lomo.