La entrada por el lado francés en el tunel de Mont Blanc ha sido bloqueado en la madrugada de ayer por un grupo de comerciantes de ganado galos, que protestaban por las pérdidas sufridas por la crisis de la lengua azul. Un centenar de camiones y unos 300 comerciantes de animales han denunciado ser los grandes olvidados en la crisis de la lengua azul. Reclaman indemnizaciones, préstamos bonificados o el aplazamiento de las cargas sociales, con el fin de compensar las pérdidas que les ha ocasionado la evolución de la enfermedad en 2007.

El motivo de haber elegido el túnel de Mont Blanc, que desemboca en Italia, es para mostrar la repulsa de los comerciantes franceses a la medida que el gobierno italiano tomó el pasado 3 de marzo, según la cual, solo puede entrar en Italia ganado procedente de Francia que haya sido vacunado. No obstante, las vacunas acaban de llegar, según la Federación francesa de comerciantes de ganado (FFCB), con lo que no ha sido posible vacunar a los animales y por tanto, enviarlos a Italia.

La FFCB señala que el presupuesto previsto para las indemnizaciones en 2007 tiene el mismo importe que el de 2006. Sin embargo, la enfermedad afectó en 2006 a solo 16 departamentos, mientras que en 2007, todo el país ha resultado afectado.