El agravamiento del número de casos de fiebre Q en Países Bajos está siendo preocupante, ya que se ha pasado de una situación anecdótica entre cuidadores y veterinarios a ser considerada epidémica. En el transcurso de este año, la administración holandesa decidió la vacunación obligatoria a ovejas y cabras en explotaciones cierto tamaño.
Como la medida ha resultado insuficiente, se ha decidido ampliar las medidas de prevención para impedir la propagación de la enfermedad. En principio, se trataría de efectuar una distinción entre explotaciones con y explotaciones sin la bacteria de la Fiebre Q y evitar el transporte de animales de empresas contagiadas a empresas no contagiadas.
Gracias a nuevas técnicas, se puede determinar por medio de un análisis del tanque de leche de cabra u oveja si la bacteria que provoca la Fiebre Q (Coxiella burnetii) se encuentra presente en un establo. Este análisis es obligatorio en todas las explotaciones ovinas y caprinas del país desde septiembre.
En la investigación de los tanques de leche se realiza un test PCR para localizar material genético del agente etiológico de la enfermedad. No se buscarán anticuerpos de la enfermedad, ya que la vacunación obligatoria invalida el resultado de esta prueba. Si el resultado es positivo, se procederá a un segundo análisis para confirmar el resultado, que si es de nuevo positivo, ampliará el control sobre la presencia de la enfermedad en un cierto número de animales de la explotación. Si de nuevo se obtiene un resultado positivo, y no antes, se considerará a la explotación contagiada.
La investigación del tanque de leche ofrecerá, en medio año, un mapa preciso de las granjas contagiadas. Se estima que al menos un 30% de las explotaciones caprinas y ovinas darán positivo en los tests. Las explotaciones declaradas infectadas tendrán que añadir a las limitaciones actuales las nuevas medidas de un plan de saneamiento, aún por definir, que podría incluir el sacrificio sanitario de los animales enfermos.
El objetivo final del Ministerio de Agricultura es impedir que las empresas libres de la bacteria se infecten, con estrictas regulaciones sobre el transporte que impidan que los animales procedentes de rebaños infectados entren en contacto con los de los rebaños libres de la bacteria, según publica el Boletín Exterior del MARM.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.