La organización profesional agraria mayoritaria del Reino Unido, la NFU, ha presentado un documento con sus propuestas para la PAC después de 2013. Opinan que los pagos directos están justificados desde que los legisladores y la sociedad exigen a los productores comunitarios unos estándares más elevados que a los productos importadores, por lo que no se puede competir vía precio. Apoyan que los pagos sean desacoplados y que se mantengan los instrumentos de mercado que aún quedan.

La renacionalización de la política agraria sería el fin de la PAC, y la NFU apoya que sea evitada a toda costa, con independencia de las distintas formas con que pueda plantearse: más flexibilidad nacional en la aplicación de las normativas, relajar las normas para las ayudas nacionales o cofinanciación nacional de las ayudas.

Proponen la intervención política para evitar el riesgo de que los mercados se colapsen por una extrema volatilidad, por lo que apoyan que se introduzcan nuevas medidas para mejorar el funcionamiento de los mercados y la relaciones entre la cadena alimentaria. Entre estas medidas están un código de conducta que evite las prácticas abusivas de las cadenas de distribución y de las industrias, un marco legislativo que permita regular las relaciones contractuales entre productores y compradores, el fomento de las organizaciones de productores y el análisis de los mercados de futuros y extensión de éstos a sectores donde no existan.