Ante el reto que supone la desaparición de las cuotas de azúcar, la Confederación francesas de remolacheros (CGB) ha firmado dos acuerdos con el fin de conseguir dos objetivos, que en estos momentos, son básicos para el sector: aumentar la competitividad a través de unos menores costes de producción y el rejuvenecimiento del sector mediante el relevo generacional.

Para el primer objetivo, han firmado un acuerdo con la Federación francesa de empresas de trabajo agrícola, con el fin de realizar varias acciones, como una encuesta sobre los equipos utilizados en la recolección de remolacha por parte de las empresas de trabajo agrícola, determinando necesidades para reducir los costos de producción, en cuestiones tales como la capacidad de arranque, la robótica, geocalización etc. También quieren desarrollar un contrato-tipo para el arranque de remolacha, de carácter anual o plurianual, que busque una tarificación de precios innovadora.

La Confederación de remolacheros también ha suscrito un convenio con la organización agraria Jeunes Agriculteurs, para fortalecer la comunicación común entre los jóvenes, colaborando en la celebración de un evento público anual de las dos organizaciones. La CGB también ha establecido una reducción del 50% en su cuota de adhesión de los jóvenes a la organización.