El Ministerio de Agricultura está trabajando en un Real Decreto que recoge una ayuda económica para la modificación de las cisternas dedicadas al abonado con purines, con el fin de que se adapten a las normas restrictivas de la Directiva sobre techos nacionales de emisión. Las ayudas representarían el 30% de la inversión (alrededor de 10.000 euros por equipo), que tendrían que hacer los ganaderos para cambiar los sistema de plato o de abanico por los de inyección requeridos por la normativa comunitaria, según UUAA.
La organización señala que este anuncio pone en tela de juicio la información de la Consejería gallega de Desarollo Rural que había avanzado que Galicia estaría exenta de esta regulación. En la actualidad no hay evidencia de que el gobierno gallego haya iniciado la tramitación de ninguna moratoria, como si se ha hecho por el gobierno central en en Cataluña (en base a la aplicación del artículo 155 de la Constitución).
UUAA denuncia que la aplicación de esta legislación es completamente injusta, ya que, como se indica en el preámbulo del proyecto de RD que prepara el Ministerio, la ganadería solo produce el 28% de las emisiones de amoniaco, de los cuales sólo el 4% se refieren al ganado vacuno, que sería el que se vería afectado por multas en la ayuda de la PAC. Además, en la Directiva 2016/2284 del Parlamento Europeo, que contiene la modificación de los sistemas de abonado se indica que los Estados miembros deben garantizar que se tengan plenamente en cuenta el impacto en pequeñas granjas a fin de limitar en la mayor medida posible, los costes adicionales .
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