La situación de la PPA en Europa hay que verla desde dos puntos de vista: cerdos domésticos y jabalíes. En cerdos domésticos, siguen apareciendo focos fundamentalmente en Ucrania y Rumania, y en mucha menor medida en Bulgaria, Lituania y Letonia, Polonia y Rusia. Los esfuerzos de control pueden estar reduciendo la incidencia en cerdos domésticos (con la excepción de Rumania y Bulgaria) pero la  población de jabalíes representa un reservorio importante en Europa del Este, que puede dificultar la erradicación y servir como fuente de nuevos saltos geográficos, con puede verse en el mapa y tablas adjuntas elaboradas por el Departamento de Agricultura del Reino Unido.

En Bélgica, desde que apareció la enfermedad, se han reportado 825 casos de PPA en jabalíes de los 3.261 analizados, mayoritariamente de las zonas de vigilancia próximas a la frontera con Francia. Bélgica pretende eliminar la población de jabalíes antes del 31 de diciembre de 2019 dentro de las áreas de vigilancia y protección..

En Bulgaria, en este mes de julio se han informado  brotes de PPA en cerdos domésticos, por primera vez desde agosto de 2018. Hasta la fecha, se confirmado 15 focos en cerdos de traspatio, la mayoría de los cuales están muy cerca de la frontera rumana. Recientemente ha habido un aumento en el número de brotes notificados en ambos lados de la frontera.

En Rumania ha habido un aumento significativo en el número de brotes en cerdos domésticos, con 281 reportados entre junio y julio de este año.

En Polonia, la enfermedad se está moviendo en dirección noroeste.

En Dinamarca, los científicos han demostrado, en condiciones de laboratorio,  que la infección por PPA puede ocurrir en cerdos domésticos tras la ingestión de moscas del establo que estuvieran infectadas, lo que podría explicar la gran cantidad de brotes en los meses de verano.