Ayer se publicó en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, la Orden 42/2020, por la que se cambia el plazo de presentación de las notificaciones de arranque como consecuencia de la situación creada por el coronavirus. Las drásticas limitaciones a la circulación de las personas, así como el hecho de que la presentación de manera física de la documentación en los registros no está garantizada en las actuales circunstancias y también que los viticultores pueden encontrar dificultades para llevar a cabo en las fechas precisas las operaciones de arranque, han movido al Gobierno regional a tomar esta medida, según recoge Unión de Uniones.

De manera que, según la Orden,  una vez ejecutado el arranque el viticultor deberá comunicarlo a la administración, excepcionalmente y para la campañas vitícola 2019/2020 hasta el 1 de junio. La fecha normal sería el 30 de abril. Además, las comprobaciones en campo se realizarán mediante control posterior a la resolución del arranque.

Por otro lado, durante el estado de alarma, aquellos viticultores personas físicas que no dispongan de certificado digital para la presentación telemática de la comunicación de arranque, podrán hacerlo a través de otras entidades que presten este servicio a las que el agricultor autorice para ello.