En los cuatro primeros meses de este año, la producción porcino en EEUU ha descendido en un 5,5% hasta 4,13 Mt. Los sacrificios fueron de 2,56 millones animales, reduciéndose un 5,8% con respecto al mismo período del año anterior. El porcentaje de reducción de los sacrificios es mayor que el de la producción, como consecuencia de un ligero aumento de los pesos al sacrificio, de acuerdo con los datos del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA).

Las últimas estimaciones de producción de porcino en EEUU, realizadas por el USDA, apuntan a que las cifras se acercarían nuevamente a los niveles del año pasado en la segunda mitad del año. Por lo tanto, para todo el año, se espera una disminución de solo un 2,3% en comparación con 2021 hasta 12,26 Mt. Es el primer descenso de la producción en muchos años.

La disminución de la producción se compensa con una menor demanda, tanto por el consumo interno como por las exportaciones. A nivel nacional, los precios significativamente más altos de la carne de cerdo en un entorno inflacionario están ralentizando las compras de los consumidores, según el USDA, si bien solo pronostican una pequeña bajada del consumo per cápita medio del 0,6% a 23,0 kg. 

En cuanto a las exportaciones, los proveedores estadounidenses tienen que hacer frente a un menor volumen de oferta, a un nivel de precios relativamente alto, lo que debilita la posición competitiva global como resultado del tipo de cambio del dólar más fuerte y a una menor demanda china.

En el primer trimestre de 2022, las exportaciones de carne de cerdo de EEUU cayeron una quinta parte a 630.000 t en comparación con el mismo período del año anterior, y a más de la mitad, a poco menos de 102.000 t hacia China. El USDA estima que las exportaciones solo caerán un 6,4% a 2,99 Mt en 2022 en comparación con el año anterior.