El Departamento de Agricultura de EEUU (USDA) ha propuesto una modificación de sus normas de producción ecológica en los sectores ganaderos (OLPS, por sus siglas en inglés). En el sector de producción de huevos ha saltado la alarma, porque si esta propuesta sigue adelante, supondrá un encarecimiento de los costes de producción.
Actualmente, en la producción de huevos ecológicos de EEUU, las prácticas de acceso al exterior para ponedoras varía según la explotación. Algunas proporcionan a las gallinas grandes áreas al aire libre y mientras que en otras, las gallinas están en el interior pero tiene acceso al exterior, que suele ser una zona más pequeñas y generalmente parcialmente cubierta (porches).
Ambas opciones están actualmente permitidas, pero con las nuevas normas propuestas, los porches tendrían que desaparecer y todas las explotaciones tendrían que tener una mayor superficie al aire libre. Para muchos productores, esta ampliación va a resultar inviable porque su actual explotación no cuenta con el espacio adicional necesario. Para otros, que tienen la explotación ecológica al lado de la convencional, va a suponer decidir con qué producción se quedan, ya que el espacio adicional tendría que venir de restárselo a la producción convencional.
En cualquier caso, las nuevas normas van a suponer un aumento de costes que el mercado no va a compensar, por lo que los productores se oponen a las mismas. Además, los avicultores se quejan de que en los últimos 10 años, las normas de producción han cambiado varias veces, lo que no solo supone una confusión para el consumidor, sino un gran perjuicio para el productor, que no puede planificar su explotación.
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