Sobre los terrenos donde el Girona Fútbol Club quiere construir su ciudad deportiva —un total de 74.000 m2 en el Pla de la Massana, en el municipio de Vilablareix (Gironès)—, Unió de Pagesos ofreció ayer una rueda de prensa conjuntamente con la Comunitat de Regantes de Bescanó, Salt y Vilablareix y la Asociación de Naturalistas de Girona para denunciar esta injerencia en suelo agrario catalogado como de especial valor agrícola de la última llanura agraria que queda en el municipio.
En primer lugar, el sindicato argumenta que no se trata de un proyecto de interés público ni estratégico, sino privado y especulativo. Apunta que, según el Texto Refundido de la Ley de Urbanismo de Cataluña, en suelo no urbanizable se consideran de interés público «las actividades colectivas de carácter deportivo, cultural, de educación en el ocio y de esparcimiento que se desarrollen al aire libre, con las obras e instalaciones mínimas e imprescindibles para el uso de que se trate»; por tanto, teniendo en cuenta que el proyecto tiene como finalidad desarrollar la actividad deportiva del Girona FC exclusivamente, el sindicato considera se trata de una recalificación encubierta de suelo de especial valor agrícola que provoca una fragmentación del espacio agrario.
En segundo lugar, Unió de Pagesos considera que, por su naturaleza y necesidades y de acuerdo con las normas subsidiarias municipales, el proyecto debe implantarse en suelo urbano. Es más, la ubicación prevista se encuentra en una llanura agraria de regadío, dentro de una explotación agraria prioritaria, según la DUN 2022, a la vez que se encuentra rodeada de otras explotaciones agrarias prioritarias. No sólo supone una pérdida de suelo agrario que genera presión hacia la disponibilidad de tierra para el campesinado de la zona, sino que también pone en riesgo la producción local y la soberanía alimentaria. De hecho, los terrenos que se pretenden ocupar hasta ahora se han destinado a la producción de forrajes que han servido para producir 60.000 litros de leche y 2.000 kg de carne anuales.
En tercer lugar, el sindicato señala que el proyecto no cumple con la Ley de espacios agrarios en la medida en que no incluye el análisis de afectaciones agrarias que pueden derivarse del proyecto. También, según las normas subsidiarias vigentes en el municipio, parte de los usos que se contemplan en el proyecto no están permitidos: por ejemplo, la construcción de un aparcamiento, aparte de 1.000 m2 de nuevas construcciones que corresponderían a despachos y zonas de descanso, entre otros.
Unió de Pagesos apunta, también, que el proyecto que está en información pública difiere mucho de lo que el consistorio de Vilablareix ha explicado y publicado; que la ubicación prevista forma parte del pulmón verde del municipio y es despensa y refugio de aves y otra fauna, y que ocasionaría otras afectaciones como la competencia por la disponibilidad de agua, una afectación directa al canal secundario de la comunidad de regantes de Bescanó, Salt y Vilablareix, contaminación lumínica y acústica…. aparte de problemas de convivencia con la actividad agraria de alrededor, por ejemplo, con el paso de la maquinaria agraria.
El sindicato también recogió todo este argumentario en las alegaciones que entregó el 13 de abril al proyecto, que tiene el nombre técnico de ‘Proyecto de actuación específica de interés público en suelo no urbanizable para la implantación de ‘ un área deportiva’, y ha mantenido varias reuniones con la alcaldesa de Vilablareix para argumentarle la grave afectación de este proyecto y proponerle alternativas.
Será muy interesante en ver en qué termina todo el problema que se ha generado en Girona. Por una parte el trabajador del campo, que vive de su trabajo, por mucho que le cueste. Por otra parte, la especulación, dinero fácil y rápido, esta vez disfrazada por algo tan interesante, como es un espacio deportivo. Como he dicho: será interesante en saber quién gana, por lo que convendría que Agrodigital continuará informando hasta el final.