Una empresa de Shangai ha desarrollado un robot que es capaz de detectar el sexo de los pollitos de un día. La compañía lo presenta como un gran avance porque reduce el tiempo y la mano de obra para clasificar los pollitos de un día entre machos y hembras. Este avance tecnológico chino contrasta con las investigaciones que se están llevando a cabo en la UE, que lo que buscan no es un sexaje más rápido de pollitos, sino encontrar sistemas que puedan detectar el sexo en el huevo, para desechar huevos y evitar el sacrificio masivo de machos.

El sistema chino utiliza una cámara para tomar fotografías y un algoritmo de inteligencia artificial para determinar el sexo de los pollitos. Todo el proceso toma menos de 3 segundos. Un operador tiene que poner el ano del pollito delante del sensor, que toma fotografías y detecta el sexo. Después de la identificación, el operador simplemente suelta los pollitos y la máquina clasifica y transfiere automáticamente los pollitos machos y hembras.

El robot tiene una precisión superior al 98% y es capaz de procesar hasta 1.200 pollitos por hora con trabajadores calificados.