La Comisión Europea ha adoptado un informe que evalúa la aplicación de la normativa de subproductos ganaderos, que se empezó a implementar en mayo de 2003, como respuesta a la crisis de la EEB. El informe, elaborado en función de la información suministrada por los Estados Miembro y la Oficina Veterinaria y Alimentaria de la UE (FVO) considera que el cumplimiento de las normas en los países comunitarios es, en general, satisfactorio.

Aunque el informe no se ha hecho público todavía, un comunicado de prensa de la Comisión menciona que una de las conclusiones de éste es que es preciso modificar ciertas cuestiones de las actuales normas. No especifica exactamente que modificaciones serían, y solo menciona que algunas medidas deberían ser más proporcionadas a los riesgos, como en el caso de los ingredientes procesados usados en cosméticos. También indica que en ciertas cuestiones habría que clarificar la legislación y clasificar nuevos productos bajo diferentes categorías de riesgo.

El informe se presentará al Consejo y al Parlamento para finales de octubre. La Comisión tiene previsto que para finales de 2006 o principios de 2007 tendrá preparadas propuestas de modificación de la actual reglamentación.

Las normas sobre subproductos ganaderos (Reglamento 1774/2002) establecen las condiciones para la recogida, transporte, almacenamiento, manejo, procesado y destrucción de los subproductos ganaderos. Asimismo, el reglamento clasifica los subproductos en tres categorías según su riesgo potencial para los animales, el público y el medioambiente y qué destino hay que dar a cada categoría. También incluye la prohibición de alimentar a los animales con restos de catering, así como reciclar alimentos entre especies, es decir, que el cerdo, por ejemplo, se alimente con subproductos procedente de otros cerdos (canibalismo).