El estado fenológico dominante en la mayoría de las parcelas de remolacha de Andalucía es “BBCH: 39” (100% suelo cubierto). Las más tempranas están en el estado “BBCH: 46-49” (60-90% tamaño raíz estimado) y las más retrasadas en “BBCH: 31-33” (10-30% suelo cubierto). Las parcelas de remolacha de la provincia de Cádiz están más adelantadas fenológicamente que las de Sevilla. En las parcelas más tardías se están realizando los últimos abonados de cobertera, así como también los últimos tratamientos herbicidas, según la información proporcionada por la Red Andaluza de Alerta Fitosanitaria (RAIF).

En cuanto a plagas, se observan adultos de Cásida (Cássida vittata) en 71% de las parcelas muestreadas en Cádiz, y en el 99% de las de Sevilla; con unas medias provinciales respectivas de 8’8 y 24 adultos/UM (Unidad de Muestra). Puestas y larvas de esta plaga se han detectado en el 69% de las parcelas de Cádiz, y en el 97% de las de Sevilla, con unas medias provinciales de 18’3 y 45 huevos+larvas/UM, respectivamente. Se recomienda vigilar esta plaga, pues su ascenso puede ser rápido, en las condiciones actuales, y más si aumentan las temperaturas. Se supera el umbral en muchas parcelas, realizándose tratamiento químico para su control.

Foto:RAIF

Se han detectado adultos de Lixus (Lixus scabricollis) en el 17% de las parcelas muestreadas en Cádiz, y en el 69% de las de Sevilla, con unas medias provinciales respectivas de 0’3 y 2’4 adultos/UM. De momento esta plaga no presenta problema alguno para el cultivo.

Los niveles de pulgones (Aphis fabae) sobre el cultivo son bajos por lo general, observándose su presencia en el 34% de las parcelas muestreadas en Cádiz, y  en el 38% de las de Sevilla, con una media provincial moderada en Cádiz, con 5 colonias (> 25 pulgones)/UM, y muy baja en Sevilla, con 1’3 colonias/UM.

La presencia de noctuidos (Spodoptera spp.) es anecdótica en la comunidad, no observándose su presencia en Sevilla y siendo muy baja en Cádiz, donde se ha registrado su presencia en el 9% de las parcelas muestreadas, con una media provincial de sólo 0’2 larvas pequeñas/UM.

En cuanto a enfermedades, los niveles de presencia de Cercospora (Cercospora beticola) son moderados en Cádiz y altos en Sevilla; detectándose esta enfermedad en el 60% de las parcelas muestreadas en Cádiz y en el 99% de las de Sevilla, con unas medias provinciales del 5% y 10’7% de hojas intermedias con presencia, respectivamente. En Sevilla se ha superado el umbral de tratamiento en el 60% de las parcelas, y en Cádiz en el 23%. Se recomienda seguir la
evolución de esta enfermedad muestreando periódicamente el cultivo, ya que se están dando las condiciones óptimas para su desarrollo y propagación. Se están realizando tratamientos fungicidas en las parcelas que superan el umbral.

Referente a Roya (Uromyces betae), de momento no se ha detectado su presencia en ninguna de las parcelas muestreadas en nuestra comunidad. Las lluvias previstas, unido a las actuales temperaturas, pueden ayudar a su instalación en el cultivo, por lo que se recomienda estar muy atentos a su primera presencia y posterior desarrollo sobre las plantas. Los tratamientos realizados para combatir la Cercospora pueden controlar también a este hongo.

La presencia de oídio (Erysiphe betae) en el cultivo es nula en ambas provincias remolacheras. Habrá que vigilar la evolución de este hongo, pues se están dando las condiciones climáticas ideales para su instalación y propagación en el cultivo. Cabe recordar que la lluvia lava el micelio de este hongo de la hoja, impidiendo su reproducción. En condiciones climatológicas favorables, este hongo se desarrolla y propaga rápidamente, infectando las hojas de las plantascercanas y contaminando toda la parcela, si no se controla a tiempo. Fuente: RAIF