La conselleria de Agricultura de la Comunidad Valenciana ha decidido prorrogar un año más, la línea de ayuda agroambiental del arroz, a través de una modificación en el Programa de Desarrollo Rural (PDR) 2014-2020 enmarcado dentro de la Política Agrícola Común (PAC). Esta medida, que había sido solicitada por AVA-ASAJA, va a permitir que los arroceros valencianos perciban en 2021 una partida de 6.700.000 euros para el mantenimiento del cultivo del arroz bajo los máximos estándares de sostenibilidad medioambiental. Sin esta ayuda, afirma la organización agraria, la rentabilidad de los productores se hubiera visto seriamente amenazada porque los actuales precios en origen no permiten cubrir por sí solos todos los costes de producción.
La conselleria de Agricultura también efectuará nuevas convocatorias de la ayuda a la producción ecológica, tanto en conversión como en mantenimiento, e incrementará el presupuesto a las ayudas a zonas de montaña, medidas que también habían sido solicitadas por AVA-ASAJA. Parte de este dinero provendrá de líneas poco solicitadas, como el fomento de sistemas agrarios de interés para las aves esteparias, que la propia conselleria reconoce que no ha tenido éxito.

Por el contrario, AVA-ASAJA critica que Agricultura reducirá la partida destinada a las ayudas a las inversiones agrarias (planes de mejora) y considera ilógico su argumento esgrimido de que en la convocatoria de 2018 no se agotó el presupuesto puesto que en la convocatoria de 2020 han faltado fondos para beneficiar a todos los solicitantes.
AVA-ASAJA lamenta asimismo que el porcentaje de ejecución de las ayudas incluidas en el PDR de la Comunitat Valenciana 2014-2020 tan solo alcanza el 34% (153 millones ejecutados de un total previsto de 450 millones). Llama la atención el escaso grado de pagos en partidas como planes de mejora (11%) o la gestión forestal sostenible (14%). La Generalitat Valenciana se sitúa así por debajo de la media española y europea en la ejecución de estos fondos agrarios.
Quema de la paja del arroz
Ante el inicio de las quemas de paja en arrozales del parque natural de La Albufera, el responsable de la sectorial del Arroz de AVA-ASAJA, Miguel Minguet, ha hecho hincapié en la prioridad de retirar todo el residuo que sea posible y en quemar el resto que no pueda ser retirado, estableciendo para ello un calendario organizado y pensado para causar las mínimas molestias a la sociedad, además de destinar los máximos esfuerzos para desarrollar a corto y medio plazo la tecnología necesaria que permita ampliar la retirada de la paja. “Los agricultores, como parte de la sociedad, sabemos que se trata de un problema grave y queremos que se habilite una solución desde el punto de vista social”, sostiene.
Algo va cambiando, para estos señores, en cuanto a la quema de la paja. Ya empiezan a diferenciarse de la «masa provechosa».
Para la mayoría de valencianos, el arroz y concretamente las ayudas subvencionadas, lo convierten en el único cultivo rentable.