Los precios de la carne de cerdo en el norte de Europa, en general, han repetido después de dos semanas de aumentos significativos, gracias a una oferta limitada. El mercado de la carne no consigue integrar plenamente estos aumentos, con un comercio tranquilo, como es habitual en estas fechas. Los mataderos están congelando a la espera de la primavera. En el sur, los precios han subido.

En Alemania, en un contexto de oferta débil pero también de comercio lento, los precios han repetido. En Austria y Bélgica, han seguido la estela alemana. Austria tiene un mercado fluido y Bélgica está exportando con facilidad y los sacrificios son bastante estables en comparación con 2023, pero un 13% inferiores a los de 2022.

En Dinamarca para la semana 9, no hay cambios en los precios.

En Francia, la cotización del MPB registró el jueves su subida máxima de 5 céntimos por segunda semana consecutiva, en un contexto de caída de la oferta.

En España, el precio subió 2,7 ct/kg. La situación es bastante similar a la de las últimas semanas, con una demanda de cerdo que supera la oferta actual, con aumentos del precio de la carne, con reducción de los márgenes de los mataderos y con exportaciones por debajo de las expectativas.

En Italia, el precio se recupera unas milésimas después de una larga serie de caídas. Esta estabilización del precio se produce cuando las ofertas son especialmente bajas pero también porque la demanda es escasa por falta de consumo.

En Estados Unidos, la tendencia de los precios sigue siendo positiva. La buena demanda de exportaciones, particularmente a México, parece estar respaldando los mercados de futuros, cuyos precios están aumentando.

En China, el precio medio vuelve a bajar. A 23 de febrero se sitúa en 13,69 CNY (1,76 euros). Según comentarios chinos, aunque el transporte de cerdos vivos se ve actualmente afectado por la lluvia y
nieve, la oferta de cerdos vivos sigue siendo suficiente y el consumo es reducido.