En los últimos dos años, la producción de cerdos para sacrificio en Dinamarca se ha reducido, lo que ha llevado a la cooperativa Danish Crown a tener que cerrar mataderos e instalaciones de procesado.

Durante los últimos 20 años, la cooperativa ha aumentado o reducido repetidamente su capacidad en función de que los socios aumentaran o redujeran sus censos. En consecuencia, durante dos décadas, la cooperativa ha tenido que invertir en más instalaciones para las épocas de gran oferta de cerdos pero que en otros momentos han trabajado muy por debajo de su capacidad, siendo poco rentables. También la cooperativa ha tenido que contratar o despedir a cientos de empleados, pagar horas extras, capacitar a nuevos empleados… ha tenido que garantizar que había capacidad disponible para la producción de los socios, lo que ha resultado terriblemente costoso.

Por este motivo, la cooperativa ha presentado una herramienta de estabilidad, basada en que las entregas de cerdos y la capacidad de sacrificio van a estar equilibradas, con lo que los costes de sacrificio se van a minimizar, lo que a su vez va a aumentar el beneficio de los cerdos.

La capacidad de sacrificio de Danish Crown se va a adaptar, con mucha precisión, al número de cerdos que los socios de la cooperativa se han comprometido a entregar diariamente durante el próximo año. Esta cantidad es lo que se conoce como «volumen A».  Es una especie de cuota de producción. Si las entregas de cerdos fluctúan sobre ese volumen A, más de lo que permiten las normas de Danish Crown, se aplicará una deducción en el precio, conocida como «deducción por estabilidad». El ganadero tendrá que notificar con 12 meses de antelación cualquier cambio en los volúmenes acordados.

La cooperativa también va a obligar a que los productores de lechones entreguen un determinado número de lechones al año. El objetivo es que, en el futuro, al menos el 90% de los cerdos sacrificados por Danish Crown procedan de socios cooperativos de productores de lechones.

Hasta ahora, en muchas ocasiones, muchos socios productores de lechones han vendido sus animales en el extranjero por los mejores precios, con lo que al final, faltaban cerdos para sacrificio en Dannish Crown.