La tasa a la exportación de trigo que las autoridades rusas introdujeron el pasado 1 de febrero para limitar la salida de este cereal fuera del mercado doméstico se va a suspender antes del 1 de julio, fecha de su finalización oficial, ha asegurado el viceprimer ministro ruso Arkady Dvorkovich. La tasa (15% ad valorem + 7,5 €/tn) se introdujo cuando se devaluó el rublo para evitar el desabastecimiento del mercado interior. Sin embargo, ahora que ha subido, es un mecanismo que está perjudicando a los agricultores rusos.

La idea de la administración rusa no es eliminar la tasa sino reducirla a cero o casi cero. Se trataría, por tanto, de sustituir esta imposición temporal de un arancel por un sistema permanente en el que el arancel sería cero o una cuantía superior a cero según evolucionaran los precios internacionales del trigo y la tasa de cambio del rublo.

Las últimas lluvias caídas han favorecido las estimaciones de cosecha de cereales. Se habla de 54 a 59 Mt de trigo para 2015, mientras que la anterior estimación solo apuntaba a 45-48 Mt.

El Ministerio ruso de agricultura también ha elevado su previsión de exportación de cereales en la campaña 2014-15. Frente a los 28,5 Mt estimados previamente ahora se prevé llegar a los 30 Mt. Desde la introducción de la tasa asta el 8 de abril, dicha medida había conseguido reducir las exportaciones de trigo en un 59% en relación con el mismo período del año precedente, hasta 1,1 Mt. Las previsiones apuntan a unas exportaciones de 19,6 Mt en esta campaña frente a los 15,6 Mt de la campaña anterior.