En el Reino Unido, el exceso de humedad ha sido el causante de que se haya sembrado menos trigo. Se estima que unas 200.000 ha (un 10% de la superficie total) se han dejado sin sembrar de este cereal de invierno, lo que supondrá que se cosechará en torno a 1,4 millones de toneladas de trigo menos de lo que se preveía inicialmente.

En Francia tampoco se ha podido sembrar el 100% de superficie prevista. En la zona de Bretaña, al oeste del país, se han dejado de sembrar de trigo entre 30.000 y 40.000 ha. No obstante, a pesar de esta incidencia, la superficie es similar a la sembrada en la campaña pasada (5,15 millones de hctáreas) y unas 250.000 ha superior a la superficie cosechada, ya que dichas hectáreas se perdieron por el duro winter-kill que afectó a los cultivos entre finales de enero y principios de febrero del año pasado.

En Bulgaria y Rumania las siembras de los dos países han sido unas 200.000 ha superiores a las del año pasado. Hay que tener en cuenta que en la campaña pasada, la falta de tempero del suelo como consecuencia de la sequía, impidió sembrar todo lo inicialmente previsto.

En Polonia, este año las siembras podrían haber sido un 10% superiores a lo cosechado el año pasado, cuando el winter-kill acabó con 200.000-250.000 ha. Para esta campaña se esperan unas siembras de 2,1 -2,3 millones de ha.

En Alemania, se ha sembrado en torno a 3,14 millones de ha, que es superior a lo cosechado el año pasado (3,05 millones de ha).

Este año, en la UE se podría llegar a las cifra de 23,2 millones de hectáreas sembradas de trigo, con lo que se igualaría el record alcanzado en 2008. El año pasado se cosecharon 22,8 millones ha.

Desde mediados de la década pasada, la superficie de trigo sembrada en la UE ha ido en aumento. Por un lado, por la eliminación del set-aside, que disparó las siembras en las fincas buenas y por otro, porque desde que en 2008 los precios del trigo se dispararán, han venido manteniendo niveles elevados.