Es previsible que se produzca una retraso en el comienzo de la cosecha de cereales en Navarra, según el informe del Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, referido a la semana entre el 21 y 28 de mayo actual, que se ha caracterizado por brumas matinales, tormentas puntuales y temperaturas diurnas ligeramente superiores a las históricas.

De hecho, en las áreas del Norte el trigo se encuentra en pleno floración, mientras en la Zona Media y en la Ribera, los trigos duros y las cebadas alcanzan fenologías entre grano lechoso y pastoso. Las continuas lluvias registradas en la fase vegetativa de los cultivos cerealistas y la dificultad en la aplicación de herbicidas han propiciado en algunos casos la fuerte presencia de avena loca y amapolas.

Por otra parte, los cultivos forrajeros ya han sido ensilados prácticamente a excepción de las zonas más frías (Erro y Espinal). Se va intensificando la siembra de maíz forrajero.

Respecto al regadío, hay que señalar que la práctica ausencia de lluvias en esta segunda mitad del mes actual ha favorecido la normalización de la recolección de diferentes cultivos de regadío, así como activar las siembras y plantaciones en marcha. A todo ello hay que añadir que el aumento de temperaturas ha agrupado la producción de bróculi de primavera, de modo que ahora se está recolectando una cantidad importante con destino al mercado fresco y a la industria. Igualmente, se recolecta en gran cantidad la alcachofa con destino a la industria.

Este es un buen periodo para la recolección de la alfalfa, cuyo primer corte ha terminado prácticamente en la Ribera Baja. En algunas esparragueras ya se ha dado por finalizada la campaña. Se observa un fuerte impulso de las plantaciones de tomate, cuya superficie puede verse incrementada, a diferencia de lo que parece no ocurrir en el pimiento.

Pamplona, 28 de mayo de 2004